La Culeca de La Chancla.


Antiguamente, el Jueves Lardero era una fiesta muy popular, en la que casi todo estaba permitido. Iniciaba solemnemente la tanda de jornadas de desmadre, goce y hartura, en las que se comía, se bebía y se bailaba hasta el hartazgo.

Lardero es un adjetivo procedente del antiguo 'lardo', que es el tocino o gordo, también el sebo o manteca del animal. Es decir, la grasa o parte menos valiosa de la bestia con la que, sin embargo, nuestras abuelas eran capaces de hacer auténticas maravillas culinarias. El término procede del latín 'lardum' o 'lardium', que es la palabra con la que los romanos denominaban el tocino y la manteca del cerdo. Y esto era lo que caracterizaba en lugares como Alfaro el abundante consumo de carne, chorizo en este caso, en los días posteriores a la matanza y previos a la Cuaresma.

El chorizo, junto con el huevo, son dos de los ingredientes fundamentales del alimento más característico del jueves lardero en la ciudad de Alfaro "la culeca”.

Culeca es un adjetivo que tiene su raíz etimológica en la palabra 'clueca', que es la gallina que envuelve los huevos para darles calor e incubarlos.


Es tradición subir al monte La Plana, en cuya falda se encuentra Alfaro, a comer la “culeca” en contacto con la naturaleza, por otra parte también es costumbre degustar la suculenta vianda para merienda-cena en compañía de amigos, cuadrillas, en bodegas y cuartos.